Cómo reconocer una vivienda adosada de calidad
En las últimas décadas la tipología de vivienda adosada se ha hecho un hueco en nuestros hábitos y forma de vida. Tradicionalmente las viviendas unifamiliares se referían a las casas de pueblos o casas de campo aisladas, y ahora al pensar en vivienda unifamiliar muchos de nosotros pensamos en unifamiliares adosados.
¿Qué aporta la tipología de vivienda adosada a nuestra forma de vida?
Entre las características más destacables de esta tipología residencial se encuentra el plus del espacio frente a la vida en un piso o apartamento. Este tipo de vivienda dispone de más espacio, tanto construido (lo que se conoce como superficie útil) como exterior (terrazas y zonas verdes).
¿Pero son todas las viviendas adosadas de calidad?
No permitas que te vendan “gato por liebre” y analiza objetivamente las características particulares de las viviendas.
Ubicación, parcela y entorno
Las viviendas adosadas suelen edificarse en urbanizaciones próximas a núcleos urbanos. La ubicación será por tanto el primer aspecto a tener en cuenta. En cuanto a la ubicación estudiaremos la proximidad a infraestructuras y servicios urbanos, en lo que se refiere a accesos, equipamientos sanitarios, educativos y demás. Y más en concreto las características del solar. En ocasiones las edificaciones se asientan sobre terrenos poco aptos para la construcción, como pueden ser cuencas naturales de ríos o escorrentías, que pueden derivar en posteriores problemas de fisuras, aguas subterráneas y otros problemas derivados de una cimentación insuficiente en su construcción.
Distribución de la superficie
Otro aspecto a analizar en detalle es la distribución de los metros cuadrados en el completo del edificio. Es por todos conocido que el tamaño en metros cuadrados es importante, no obstante, la distribución de los metros puede conllevar una revalorización del inmueble. Identificaremos como una vivienda adosada de calidad aquella que tenga sus metros distribuidos en menor altura. Esto se debe a que un mayor número de plantas convierte la vivienda en menos accesible y más incómoda para el día a día. Una forma muy sencilla para reconocer una vivienda adosada de calidad sin necesidad de metro es ver su planta de acceso. Un buen adosado ha de permitir el acceso desde la calle sin escaleras y dispondrá de salón comedor, cocina, aseo y una habitación. El simple hecho de que disponga de una habitación en la cota de acceso le da mucho valor a la vivienda permitiendo que sea accesible e incluso puedas desarrollar la vida en una única planta en caso de exigencia o necesidad.
Exteriores: fachadas y terrazas
El exterior de las casas también importa. La vida en las ciudades en ocasiones poco agradable por el ruido y otras molestias nos ha llevado a encerrarnos en el interior de las viviendas. Pero los exteriores son también muy importantes y más si cabe en las casas adosadas. Reconocerás una vivienda adosada de calidad por su fachada y sus espacios exteriores. Las habitaciones con terrazas, los salones que tienen continuidad con el exterior por sus ventanales amplios y generosos. No tendría sentido adquirir una casa adosada para vivir encerrados entre cuatro paredes, sin disfrutar de terrazas y ambientes exteriores.
La importancia de las fachadas es evidente en toda construcción. Un buen diseño y unos buenos acabados y materiales harán que la edificación soporte mejor el paso del tiempo, y de ahí que mantenga su valor a largo plazo.
El valor del producto inmobiliario
Como veis es muy importante reflexionar bien a la hora de acceder a una vivienda ya que no todos los productos inmobiliarios tienen el mismo valor. Aspectos sencillos de identificar que nos darán mayores garantías del comportamiento de tu bien inmueble con el paso de los años. Así con estas fáciles comprobaciones desde Attikos os ayudamos a identificar una vivienda adosada de calidad para que no te equivoques en una decisión tan importante como es la compra de una casa.